Capítulo 2.
-
Hogar dulce hogar.- Dijo la rubia entrando al
pequeño piso que habían alquilado. No era un piso muy grande, un salón con
cocina estilo americáno, dos habitaciones y un cuarto de baño, lo justo para
ellas dos.- No se puede comparar con tu casa en Lima, lo sé, pero piensa, así
tendremos menos que limpiar…
-
Es pequeño, pero me gusta… .- Respondió la
latina con una pequeña sonrisa.- Voy a avisar a Noah que llegamos antes de
ponerme a colocar mis cosas.
-
Esta bien, pero date prisa, quiero ir a pasear
por Times Square, me acompañarás ¿verdad?
-
Claro, además podríamos mirar por los musicales
por si casualmente encontramos a Rachel Berry en alguno de ellos… Aunque sea
limpiando al finalizar el show, sabes que no iba a parar hasta conseguir
trabajar en un teatro, no le importaba el puesto.
-
Lo sé… Pero hace tiempo que no sabemos nada de
ella… Quizá incluso este de actriz…
-
Quizá… Sabes lo que me preguntó yo… ¿Que habrá
sido de Brittany? No he vuelto a saber nada de ella desde aquella última fiesta
las cuatro juntas…
-
Pues no lo se… Sabes como era ella, seguro que
está triunfando y haciendo giras con cantantes famosos…
-
La echo mucho de menos Quinn… Siempre la he
echado de menos…
-
Lo sé, quiero decir, todo el mundo sabía que
Britt y tú eráis como dos gemelas, no os podíais separar la una de la otra en
ningún momento… Si no fuera por tu relación con Puckermann incluso hubiera
pensado que vosotras teníais algo.
-
¿Pero que dices Quinn? Britt y yo sólo éramos
amigas.- Dijo Santana empezando a sonrojarse.
-
Jajajajja vale vale López, no te pongas así, era
solo una broma… Sabes, creo que también podríamos encontrarla… Pero antes de
nada busquemos a Rachel, lo tenemos más fácil, después de todo, vive en la
misma ciudad que nosotras… Tan difícil no puede ser… ¿no?
-
Solo lo sabremos investigando Quinn… Tenemos un
par de días libres antes de empezar a trabajar no? Pues disfrutémoslos…
-
Esta es la Santana que a mi me gusta…
Terminaron de ordenar sus cosas y se cambiaron de ropa para
ir a dar un pequeño paseo por la ciudad. Vivían a dos calles de Times Square,
por lo que al ratito estaban allí, admirando la majestuosidad de aquella zona
de la ciudad.
-
Quinn… Esto es mejor de lo que recordaba….
-
Lo sé San, creo que me he enamorado de la
ciudad…
-
Cásate con ella, es lo más cerca que vas a estar
de una relación seria.- Dijo Santana empezando a reir.
-
Ja, ja, ja, que graciosa ha salido aquí mi
amiga.
-
Venga Quinn, era una broma, no te enfades
conmigo, aunque la razón de que haga estas bromas es culpa tuya.- En ese
momento, Santana chocó con alguien.- Perdón.- Dijo mirando a la persona con
quien se había golpeado. En ese momento la latina se quedó paralizada, mientras
que la chica la sonrío pidiéndole disculpas y continúo andando, agarrada al
brazo de otra mujer.
-
Santana, ¿te pasa algo? Te has quedado como medio
paralizada.
-
Quinn, esa chica, era igual que Brittany, ¿no la
has visto?
-
San, hoy te ha dado fuerte con tu rubia… En
primer lugar, Britt se mudó a Los Ángeles, no a NY, y segundo, este lugar es
enorme como para encontrártela…
-
Supongo que tienes razón… Habrá sido cosa de mi
imaginación.
En ese mismo momento, en el mismo lugar de la ciudad, cierta
rubia daba vueltas a lo que le acababa de ocurrir. ¿Podría ser realmente ella?
-
Venga rubia, tenemos ensayo y sabes que tienes
que bailar bien detrás de mi, vale que sea la estrella principal, pero si tú
por detrás lo estropeas quedamos mal las dos…
-
Nunca cambiarás Berry.- Respondió la rubia con
una sonrisa.- Es solo que necesitaba pensar un poco, ahora mismo voy.
-
¿Y que piensa tanto mi bailarina preferida? ¿Te has
enamorado?¿Quién es la afortunada?
-
Para Rachel, no me he enamorado de nadie, es
sólo algo que me ha pasado en la calle antes.
-
Britt, yo iba contigo por la calle, y no ha
pasado nada.
-
Lo sé, es sólo que me golpeé con una chica y… me
pareció Santana, sé que no es posible que sea ella, pero me lo pareció…
-
Oh… Vaya, así que era eso… Brittany, siempre he
querido preguntarte una cosa, pero nunca me he sentido segura de poder hacerlo…
Creo que ha llegado ese momento…
-
Dispara…
-
Cuando estábamos en el instituto… Tú… ¿Estabas
enamorada de Santana?
-
¿Qué? ¿De Santana?... Vale si, lo estaba, pero
como sabes tenía como 0 posibilidades…
-
Nunca me gustó su relación con Noah…
-
Ni a mi… Bueno a mi no me gustaría ninguna
relación que ella pudiera tener, pero con el tiempo, y principalmente al
separarme de ella, aprendí que si la quería lo mejor que podía era desear que
fuera feliz, con eso me servía…
-
Tienes un gran corazón Britt… Y ahora vamos a
ensayar, estrenamos en dos semanas y tenemos que tenerlo listo.
Los días fueron pasando, y no se volvieron a encontrar,
llegó el momento en el que Santana y Quinn tendría que ir a ver la oficina
donde iban a trabajar. No era un lugar muy grande, pero si tenían el espacio
suficiente para poder trabajar con tranquilidad y todo el espacio se repartía
en una sola planta. Empezarían a trabajar en dos días, el primer día no
coincidían con el horario, ya que Quinn tendría que tomar las fotos en primer
lugar para que luego Santana esa misma tarde pudiera editar las fotos y las
hojas en las que iría la entrevista y las fotos.
-
Bueno, pues tenemos un par de días más de
descanso, pero realmente tengo que empezar a pensar como en un estudio de
fotografía tan pequeño, voy a poder hacer fotos a 11 personas que forman el
elenco .- Les habían dicho que tenían que hacer las fotos a los actores de un
nuevo musical que estrenaría muy pronto en Broadway, la idea le entusiasmaba
más a Santana que a Quinn.
-
No te empieces a estresar, piensa que tienes dos
días para organizarlo mentalmente…
-
Para ti es fácil decirlo, vas a llegar cuando
todo mi estrés haya acabado, no es justo…
-
La verdad… Me da pena perderme ese momento…
Sería muy divertido verte en pleno ataque, me estaría riendo de ti durante
mucho tiempo…
-
A mi no me hace gracia… Sigue así que le digo al
jefe que he encontrado otra editora y te mando a Lima de vuelta.- Dijo Quinn
sacándole la lengua como si fuera una niña pequeña. Santana le respondió de la
misma forma y echándose a reír después.- Santana ahora dime la verdad, llevamos
aquí 4 días, ¿te arrepientes de haberte venido aquí?
-
No, no me arrepiento de nada, es más me lamento
por no haberlo hecho antes…
-
Quien lo iba a decir… ¿hay algo más que deba
saber?
-
No… .- Contestó de manera dudosa.
-
¿De verdad? Por cierto, no es que me importe ni
nada de eso, pero ¿cómo está tu marido?
-
Ah bueno, está bien o eso dice, como no estoy
allí va a comer con su madre todos los días… Pero no sé, creo que algo me
oculta.
-
Rápido empezamos Santana…
-
No es lo que piensas, quiere pedirme algo, pero
no sé el que… Ahora mismo me arrepiento de estar aquí casada… Si fuera soltera
habríamos ido de fiesta en fiesta todas las noches, y así no puedo, mi
conciencia no me lo permite…
-
Divórciate de Noah, vive la vida aquí en NY, y
cuando acabes si quieres te vuelves a casar con él. Aunque el verdadero
problema es que te casaste demasiado pronto querida amiga, tienes 23 años,
deberías poder tener una noche loca de vez en cuando y poder divertirte sin
pensar en lo que pueda pasar después…
-
Quiero a Noah, y cuando me casé con él lo tenía
muy claro Quinn, eso de momento no va a cambiar.
-
Ya veremos si de aquí a un tiempo me dices lo
mismo…
-
Quinn.- Regañó Santana.- Ya lo hemos hablado
muchas veces, dejemos el tema vale, disfrutemos estos dos últimos días de
libertad newyorkina y ya veremos que pasa.
-
Esta es mi Santana… A veces echo de menos la
Santana que se iba de fiesta sin importarle nada ni nadie…
-
Quizá vuelva.
-
¡Ojalá!
No hay comentarios:
Publicar un comentario